Normalmente, los niños desarrollan la capacidad de sentarse, estar de pie, caminar y hablar a edades más predecibles, pero cuando esto no ocurre o llega tarde se conoce como el trastorno de desarrollo de la coordinacion (TDC) o dispaxia.
El trastorno de desarrollo de la coordinacion, como su nombre lo indica, es la falta de coordinación entre las intenciones mentales y la capacidad para que su cuerpo lleve a cabo esas intenciones.
Por ejemplo, se podría pensar “tengo que atar mi zapato”. Sin embargo, el cerebro no envía correctamente las instrucciones para que las manos aten el zapato. Es decir, su cerebro sabe cómo atar zapatos, pero sus manos no pueden seguir las instrucciones de su cerebro. Lo mismo sucede cuando se trata de correr, saltar, escribir, abotonarse la camisa, y muchas otras tareas que la mayoría de la gente da por sentado.
Las personas con TDC generalmente tienen una inteligencia normal. Sin embargo, el trastorno de desarrollo de la coordinacion suele llamarse “síndrome del niño torpe”. Esto puede llevar a otros a pensar que las personas que padecen esta condición son ineptos o poco inteligente porque no pueden realizar tareas básicas.
Esta condición puede ser considerada como un trastorno de la infancia, pero los efectos continúan en la edad adulta.
Los síntomas del trastorno de desarrollo de la coordinacion
Los signos de TDC pueden aparecer poco después del nacimiento. Los recién nacidos pueden tener problemas para aprender cómo chupar y tragar leche. Los niños pequeños pueden ser lentos para aprender a voltearse, sentarse, gatear, caminar y hablar.
Al entrar en la escuela, los síntomas de la enfermedad pueden ser más fuerte. Los síntomas pueden incluir:
- El andar inestable
- Dificultad para bajar escaleras
- Dejar caer objetos
- Chocar con los demás
- Tropiezos frecuentes
- Dificultad para atarse los zapatos, ponerse la ropa, y otras actividades de autocuidado
- Dificultad para realizar las actividades de la escuela, tales como escribir, colorear, y con unas tijeras
Las personas con trastorno de desarrollo de la coordinacion pueden llegar a ser conscientes de sí mismo y retirarse de deportes o actividades sociales. Sin embargo, el ejercicio limitado puede conducir a un mal tono muscular y aumento de peso. El mantenimiento de la participación social y la buena condición física es esencial para superar los desafíos de la TDC.
¿Qué causa el TDC?
Las causas del trastorno de desarrollo de la coordinacion no son bien comprendidas, pero los investigadores creen que es el resultado del retraso en el desarrollo cerebral. Las personas con TDC por lo general no tienen otros problemas médicos que pueden explicar el trastorno. En algunos casos, el TDC puede ocurrir con otros trastornos, como el trastorno de hiperactividad con déficit de atención o que causan discapacidad intelectual. Sin embargo, estas condiciones no están vinculados.
¿Cómo se diagnostica el trastorno de desarrollo de la coordinación?
El TDC es difícil de diagnosticar porque los síntomas pueden ser confundidos con los de otras condiciones. El Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-V) enumera cuatro criterios que se deben cumplir para un diagnóstico de TDC:
- El niño presenta retrasos para alcanzar el desarrollo motor.
- La condición interfiere significativamente con las actividades de la vida diaria y / o el rendimiento académico.
- Los síntomas comienzan temprano en la vida del niño.
- Las dificultades con las habilidades motoras no se explican mejor por la discapacidad intelectual, discapacidad visual o trastornos cerebrales.
¿Cómo se trata dispraxia?
El trastorno de desarrollo de la coordinacion se trata con un programa a largo plazo de la educación, terapia física, terapia ocupacional y entrenamiento de habilidades sociales para ayudarle a adaptarse a la enfermedad.
La educación física puede ayudarle a desarrollar la coordinación, el equilibrio y una mejor comunicación entre el cerebro y el cuerpo. Los deportes individuales como la natación o el ciclismo pueden ofrecer mejores oportunidades para construir las habilidades motoras de los deportes de equipo. El ejercicio diario es esencial si usted tiene TDC, con el fin de entrenar a su cuerpo y el cerebro para trabajar juntos y para reducir el riesgo de obesidad.
La terapia ocupacional puede ayudarle a dominar las actividades diarias. Los terapeutas ocupacionales saben un montón de técnicas para ayudar a las personas a realizar tareas difíciles.
Lo que es de esperar en el largo plazo
Desafortunadamente, los niños con TDC generalmente continúan experimentando síntomas como adultos. La formación adecuada y la educación en las habilidades motoras pueden ayudar a llevar una vida normal y plena. Su pronóstico depende de lo bien que se adapte al TDC y superar sus limitaciones.