¿Cómo disciplinar a los niños sin nalgadas? Aquí le ofrecemos algunos consejos que le pueden ayudar en la disciplina de sus hijos sin necesidad de recurrir al contacto físico. Tome en cuenta que las nalgadas pueden traer más problemas como:
- Comportamiento antisocial
- Agresión
- Lesión
- Problemas de salud mental
Los críticos dicen que simplemente no funciona.
Utilice el refuerzo positivo cuando su hijo hace algo bueno. La alabanza funciona. Los niños van a buscar una nueva aprobación.
Formas de disciplinar a los niños sin nalgadas
Cambiar el medio ambiente
Cuando los niños están empeñados en un juguete, muchas veces cambiar su entorno también puede cambiar su comportamiento. La supresión del juguete también es una forma de castigo menos grave que una nalgada.
Preparar, elaborar, preparar
Si va a salir a alguna parte con su niño lleve algunos juguetes para distraerlo. Si la somnolencia puede traerle problemas, piense en una siesta para su niño antes de salir. Estas son buenas opciones para contrarrestar el mal comportamiento antes de que suceda.
Ser autoritario
Una forma de disciplinar a los niños sin nalgadas es a través del establecimiento de reglas. La flexibilidad está bien, especialmente con los niños mayores. Pero las normas para los niños en el hogar son necesarias y a veces el castigo también. Piense en la publicación de las reglas y sus consecuencias en algún lugar de la casa.
Ser consistente
Si una regla del hogar dice que sus niños deben lavarse las manos antes de comer, asegúrese de que lo cumplan. Las reglas no funcionan si son aplicadas de manera selectiva. Sea consistente en ellas.
Las consecuencias de un mal comportamiento
Todo el mundo tiene que saber que un mal comportamiento tiene consecuencias. Algunas opciones podrían ser castigarlos con no ver televisión, ni teléfono móvil, o salidas al patio a jugar. Los niños deben saber que romper las reglas tiene un costo. Recuerde ser firme y consistente.
Hacer oídos sordos
A veces, ignorar el mal comportamiento puede tener un efecto positivo. Esto se puede trabajar muy bien, especialmente con los niños más pequeños.
Cuando los niños tienen ansias de atención no reflejar ninguna acción al respecto puede ser bueno.
Darles un tiempo de espera
Es una herramienta útil y eficaz. Una buena regla es de un minuto por cada año de edad del niño. Él o ella debe guardar silencio en una esquina o una silla, esta es una manera de disciplinar a los niños sin nalgadas.
No interactúe con el niño mientras está en el minuto de castigo. Cuando se acabe el tiempo sugiera al niño que ofrezca una disculpa por su comportamiento.
Tomar su propio tiempo de espera
Si usted ha perdido la paciencia y está a punto de alzar su mano respire profundo y cuente hasta 10.
Tómese el tiempo suficiente para conseguir la calma para que sepa qué hacer la próxima vez. El humor también puede romper la tensión.
Mirar hacia otro lado
Si el niño quiere un juguete que alguien más tiene propóngale mirar otro juguete. Si el niño está golpeando para obtener lo que quiere, enviarlo a otra habitación puede ser una buena técnica. Enseñar a los niños a compartir es otra táctica.
Ser compasivo
Un estudio de Stanford mostró que los profesores de secundaria que tomaron una “mentalidad de empatía” hacia los estudiantes inquietos lograron reducir el número de suspensiones. Esto también lo puede aplicar en el hogar. Si su hijo se porta mal, hable con él con calma, claridad y comprensión.
Darle un abrazo
Los niños se comportan mal. Son niños. Y los buenos padres los disciplinan para ello. Pero el dar y recibir no tiene por qué ser negativo. Utilice estas acciones como un momento de enseñanza para promover el buen comportamiento.
Asegúrese de que está entendido
Cuando está disciplinando al niño asegúrese de ser claro. Mire a su hijo a los ojos cuando le esté diciendo lo que debe hacer.
Si aun así se portan mal, explique las consecuencias de sus acciones. Recuerde ser consistente.
Está bien negociar
A veces negociar la disciplina y los castigos, especialmente con los niños mayores, puede ayudar. La participación de los niños en la toma de decisiones se añade a su juicio moral.