Una investigación del Sistema de Informes de Análisis de Fatalidades (FARS) de Estados Unidos mostró que en el año 2010, los asientos de seguridad para niños redujeron lesiones mortales en un 71 por ciento de los niños menores de un año de edad, y un 54 por ciento para los niños de tres, cinco y nueve años de edad.
En este sentido la Academia Americana de Pediatría (AAP) y la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) actualizó sus recomendaciones sobre el uso de los asientos de seguridad. Estas sugieren que los padres deben usar estos asientos con mayor refuerzo y durante más tiempo de lo establecido.
Los padres quieren proteger a los niños, pero a veces a ellos no les gusta los asientos de seguridad. ¿Cuál es la mejor manera de conseguir que se cumplan?
Recomendaciones para el uso de los asientos de seguridad para niños
Use un asiento mirando hacia atrás hasta la edad de dos años
Los padres deben colocar a sus hijos mirando hacia atrás hasta la edad de dos años. O hasta que se superan los límites de peso y altura del asiento. De esta forma los niños tienen menos riesgo de sufrir una lesión durante un accidente.
Un asiento orientado hacia atrás soporta todo el cuerpo del niño. Mientras que un niño pequeño en un asiento orientado hacia delante puede sufrir lesiones en la cabeza y el cuello.
Use un asiento mirando hacia el frente con arnés para el mayor tiempo posible
Cuando el niño tiene la edad suficiente para estar sentado de frente, se debe usar un asiento de seguridad con arnés. Esto debe ser hasta que el niño tenga al menos cuatro años.
Use un asiento elevado con cinturón de seguridad
De acuerdo con la APP, los niños de hasta nueve pulgadas de altura. Esto puede significar que algunos niños usarán este tipo de asiento hasta la edad de 12 años.
Hable con su hijo del asiento de seguridad para niños
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras admite que los asientos de seguridad para niños pueden ser una molestia para los más pequeños.
Para hacerlo más fácil, los padres deben explicarle al hijo cómo se pueden ajustar debido a su altura y peso.
Un ejemplo sería hablarle al niño sobre lo que podría suceder si de pronto un gato aparece frente al vehículo y hay que pisar el freno repentinamente. Explíquele que el cinturón de seguridad correctamente colocado, puede ayudar a que se mantengan seguros. Mientras que el cinturón de seguridad en el lugar equivocado podría lastimar.