La asfixia del bebe recien nacido, o también llamada asfixia neonatal, es una condición que se produce cuando un bebé no recibe suficiente oxígeno durante el parto. Esto puede ser fatal. Otros nombres para ello son la asfixia perinatal, encefalopatía hipóxico-isquémica y la asfixia al nacer.
¿Cuáles son los síntomas de asfixia del bebe recien nacido?
Los bebés no pueden experimentar los síntomas de asfixia neonatal de inmediato. La frecuencia cardíaca fetal que es demasiado alta o baja puede ser un indicador.
Su bebé puede experimentar síntomas inmediatos después del nacimiento. Estos pueden incluir:
- La piel que aparece pálido o azul
- Dificultad para respirar, lo que puede causar síntomas tales como aleteo nasal o respiración abdominal
- Una frecuencia cardíaca lenta
- El tono muscular débil
El tiempo que pase el bebe sin oxígeno afecta a la gravedad de los síntomas. Cuanto más largo sea este periodo más probabilidades hay de que experimente síntomas de la asfixia. Los síntomas más graves pueden incluir lesiones de:
- Corazón
- Cerebro
- Riñones
¿Cuáles son las causas de la asfixia neonatal?
Cualquier cosa que afecta la capacidad del bebé para tomar el oxígeno puede causar asfixia neonatal. Durante el parto, los médicos deben administrar cuidadosamente los niveles de oxígeno tanto para la madre y el bebé para reducir los riesgos.
La asfixia del bebe recien nacido se puede producir si ocurre uno o más de los siguientes:
- Bloqueo de las vías respiratorias de su bebé
- Su bebé tiene anemia, lo que significa que sus células de la sangre no llevan suficiente oxígeno
- La entrega dura demasiado tiempo o es difícil
- La madre no recibe suficiente oxígeno antes o durante el parto
- La presión arterial de la madre es demasiado alta o baja durante el parto
- Una infección afecta a la madre o el bebé
- La placenta se separa del útero demasiado rápido, resultando en una pérdida de oxígeno
- El cordón umbilical se envuelve alrededor del bebé inadecuadamente
¿Quién está en riesgo de asfixia neonatal?
De acuerdo con el Hospital de Niños de Seattle, la asfixia del bebe recien nacido se produce en aproximadamente 4 de cada 1.000 nacidos vivos en los Estados Unidos. Los bebés prematuros tienen un mayor riesgo para esta condición.
Los bebés nacidos de madres con las condiciones que afectan el embarazo, como la diabetes mellitus o la preeclampsia, también están en mayor riesgo.
Un estudio publicado en la Revista Italiana de Pediatría señala que la edad de la madre o el bajo peso al nacer del bebé son también factores de riesgo. También es más común en los países en desarrollo donde las madres tienen menos acceso a la atención prenatal y postnatal apropiada.
Posibles tratamientos
La gravedad de los síntomas de su bebé influye en el tratamiento. El momento cuando recibe el diagnóstico también afecta. Por ejemplo, las madres pueden recibir oxígeno adicional antes de la entrega para impulsar la oxigenación de un bebé antes del nacimiento. Un parto por cesárea es un tratamiento potencial en partos prolongados o difíciles.
Después del nacimiento, los bebés con la condición pueden necesitar ventilación para apoyar su respiración.
Se ha demostrado que mantener al bebé caliente también puede reducir los efectos nocivos. Los médicos también controlan la ingesta de líquidos y la presión arterial del bebé para asegurarse de que está recibiendo suficiente oxígeno.
Algunos bebés pueden sufrir ataques como consecuencia de la asfixia neonatal. Los médicos deben tratar con cuidado estos bebés para evitar daños por las convulsiones.
La asfixia neonatal es una causa importante de daño cerebral y la muerte en los bebés en todo el mundo. El diagnóstico precoz y el tratamiento oportuno de la enfermedad son vitales para salvar al bebé y minimizar las complicaciones.