La vulvovaginitis infantil es el problema ginecológico más frecuente en las niñas antes de la pubertad. Los médicos creen que esto es debido a los bajos niveles de estrógeno.
Los casos leves son muy frecuentes en las niñas, de hecho constituye e 25 por ciento de las consultas en Ginecología Pediátrica. Este tipo de infección tiene una incidencia máxima entre los tres y los seis años debido a las características anatómico-fisiológicas de estas edades.
Para diagnosticar la vulvovaginitis infantil, el médico tendrá que realizar un examen pélvico. Una preparación puede ser necesario, para identificar correctamente la causa de su inflamación. Esto implica recoger un poco de flujo vaginal para la evaluación microscópica. El médico al identificar la infección podrá prescribir el tratamiento más eficaz.
Cuando comienza la pubertad, la vagina se vuelve más ácida y las infecciones por lo general se detiene. Antes de la pubertad, la infección se va a tratar con el baño diario, esteroides, y una dosis baja antibióticos tópicos.
¿Cuáles son los síntomas de la Vulvovaginitis infantil?
Los síntomas de vulvovaginitis varían y dependen de su causa. En general, los síntomas cantan incluyen:
- Irritación genital de la zona
- Prurito
- Inflamación alrededor de los labios y el pecado perineal
- El aumento del flujo vaginal con olor fuerte
- Molestias para orinar
Causas de la Vulvovaginitis infantil y cómo prevenirla
Las causas más frecuentes incluyen infecciones, sustancias u objetos irritantes (jabones…), tumores u otro tejido anormal, radioterapia, fármacos y cambios hormonales. Además, las heces pueden pasar desde el intestino hasta la vagina por un trayecto anormal (fístula) y provocar una vaginitis.
Lo habitual es que la infección surja debido a una deficiente higiene íntima de las pequeñas cuando dejan el pañal y empiezan a tener cierta autonomía a la hora de ir al baño.
Y es que la higiene personal insuficiente puede favorecer el crecimiento de bacterias y hongos así como causar irritación. De ahí la importancia de enseñar a las niñas a limpiarse de delante hacia atrás, en sentido vulva-ano.
Cuando la niña se limpia de atrás hacia adelante cada vez que va al baño, puede producirse una proliferación de un tipo de bacterias que se encuentra en las heces y que pueden llegar a la zona vaginal.