Las causas del trastorno del espectro autista (TEA) siguen siendo desconocidas. Sin embargo, los expertos creen que han identificado ciertos factores que pueden aumentar el riesgo.
El trastorno del espectro autista
Hay alguna evidencia de que el período crítico para el desarrollo de TEA se produce antes, durante e inmediatamente después del nacimiento. De acuerdo con el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la mayoría de los científicos están de acuerdo en que la genética afecta las posibilidades de desarrollar TEA. Los factores ambientales también parecen jugar un papel.
Factores genéticos
La genética puede afectar el riesgo de algunas formas de autismo. Si usted tiene un hermano, hermana, gemelo, o padre con TEA, es más probabilidades de desarrollarla también.
Algunas condiciones médicas también se han relacionado con TEA. Estos incluyen trastornos genéticos tales como el síndrome X frágil y la esclerosis tuberosa.
Las tasas de TEA son mucho más altas entre los niños con esclerosis tuberosa que en aquellos que no tienen la enfermedad, sugiere el CDC.
Factores ambientales
Algunos expertos sospechan que la exposición a metales pesados y otras toxinas en el medio ambiente aumenta el riesgo.
Algunos medicamentos recetados, tales como la talidomida y el ácido valproico, también se han relacionado con el trastorno de espectro autista. Si su madre biológica toma estos medicamentos, mientras que ella está embarazada, puede aumentar el riesgo de desarrollar la condición.
De acuerdo con la Sociedad de Autismo, los investigadores también están explorando posibles vínculos entre TEA y ciertas infecciones virales o desequilibrios metabólicos.
Los niños nacidos de padres mayores corren un mayor riesgo de desarrollar TEA también, según el CDC.
Lo que debe hacer ahora
Mantener los factores ambientales en mente puede reducir el riesgo de desarrollar el trastorno de espectro autista en usted o su hijo, pero a veces están fuera de su control. Hable con su médico si tiene alguna preocupación.