Existen diversos tipos de cirugia cerebral que se realizan para corregir anomalías en el cerebro. Por lo general, estas fallas pueden deberse a defectos de nacimiento, enfermedad, lesión u otros problemas.
Es posible que necesite una cirugia cerebral si usted tiene cualquiera de las siguientes condiciones en o alrededor del cerebro:
- Vasos sanguíneos anormales
- Un aneurisma
- Sangría
- Coágulos de sangre
- Daños en el tejido protector
- Epilepsia
- Abscesos
- Daño a los nervios o la irritación del nervio
- Enfermedad de Parkinson
- Presión después de lesión en la cabeza
- Fractura de cráneo
- Un golpe
- Tumores cerebrales
- Acumulación de líquido en el cerebro
No todas estas condiciones requieren cirugia cerebral, pero muchas de ellas pueden ser aliviadas por este procedimiento especialmente si suponen un riesgo en su salud y representen problemas más graves. Por ejemplo, un aneurisma cerebral no requiere cirugía cerebral abierta, pero puede necesitar una cirugía abierta en caso de rotura de los vasos.
Los tipos de cirugia cerebral
Hay varios tipos de cirugia cerebral. El que se vaya a utilizar dependerá del problema a tratar.
Craneotomía
Una craneotomía es uno de los tipos de cirugia cerebral que implica hacer una incisión en el cuero cabelludo y la creación de un agujero conocido como un colgajo óseo en el cráneo. En este sentido, el agujero y la incisión se hacen cerca de la zona del cerebro que se está tratando.
Durante la cirugía cerebral abierta, el cirujano puede optar por:
- Extirpar tumores
- Cortar un aneurisma
- Drenar la sangre o fluido de una infección
- Eliminar el tejido cerebral anormal
Cuando el procedimiento se ha completado, el colgajo óseo normalmente se fija en su lugar con las placas, suturas, o alambres. El agujero puede dejarse abierto en el caso de tumores, infección o inflamación cerebral. Cuando se deja abierta, el procedimiento es conocido como craniectomía.
Biopsia
Este procedimiento se utiliza para eliminar una pequeña cantidad de tejido cerebral o un tumor para que pueda ser examinada bajo un microscopio. Esto implica una pequeña incisión y el agujero en el cráneo.
Cirugía endoscópica endonasal mínimamente invasiva
Este es otro de los tipos de cirugia cerebral que permite al cirujano eliminar tumores o lesiones por la nariz y los senos paranasales. Se les permite acceder a partes de su cerebro sin hacer una incisión.
El procedimiento implica el uso de un endoscopio, que es un dispositivo telescópico equipado con luces y una cámara de manera que el cirujano puede ver donde están trabajando. Su médico puede usar esto para tumores en la glándula pituitaria, tumores en la base del cráneo, y los tumores que crecen en la parte inferior del cerebro.
Neuroendoscopia mínimamente invasiva
Similar a la cirugía endonasal endoscópica mínimamente invasiva, la neuroendoscopia utiliza endoscopios para eliminar los tumores cerebrales. El cirujano puede hacer agujeros pequeños, del tamaño de una moneda, en el cráneo para acceder a partes de su cerebro durante la cirugía.
Estimulación cerebral profunda
Al igual que con una biopsia, este procedimiento consiste en hacer un pequeño agujero en el cráneo, pero en lugar de la eliminación de un pedazo de tejido, el cirujano inserta un pequeño electrodo en una porción profunda del cerebro. El electrodo se conecta a una batería en el pecho, como un marcapasos, y transmitirá señales eléctricas que ayudará con los síntomas de diferentes enfermedades, como la enfermedad de Parkinson.
Los riesgos de la cirugía cerebral
Todos los procedimientos quirúrgicos implican algunos riesgos. Por lo tanto, cualquiera de los tipos de cirugia cerebral significa un evento médico importante que conlleva un riesgo adicional.
Los posibles riesgos asociados con la cirugia cerebral incluyen:
- Reacción alérgica a la anestesia
- Sangrado en el cerebro
- Un coágulo sanguíneo
- Hinchazón del cerebro
- Coma
- Alteración del habla, la visión, la coordinación o el equilibrio
- Infección en el cerebro o en el sitio de la herida
- Problemas de memoria
- Convulsiones