Los sintomas de la cirrosis hepatica alcoholica generalmente se desarrollan cuando una persona está entre las edades de 30 y 40.
El hígado es un órgano grande con un trabajo importante en su cuerpo. Se filtran las toxinas de la sangre, descompone las proteínas, y crea la bilis para ayudar al cuerpo a absorber las grasas. Cuando una persona bebe alcohol en exceso a lo largo de décadas, el cuerpo comienza a reemplazar el tejido sano del hígado por tejido cicatricial. Los médicos llaman a esta condición la cirrosis hepatica alcoholica.
A medida que la enfermedad progresa más de su tejido hepático sano es reemplazado por tejido cicatricial, el hígado deja de funcionar correctamente.
Los sintomas de la cirrosis hepatica alcoholica
Una vez que la enfermedad progresa, los sintomas de la cirrosis hepatica alcoholica se hacen más notorios. Estos sintomas son similares a otros trastornos hepáticos relacionados con el alcohol. Incluyen:
- Ictericia
- Hipertensión portal, lo que aumenta la presión sanguínea en la vena que viaja a través del hígado
- Picazón de la piel (prurito)
¿Qué causa la cirrosis hepatica?
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Los daños causados por el abuso repetido y excesivo de alcohol conducen a la cirrosis hepatica. Cuando el tejido hepático se inicia a la cicatriz, el hígado no funciona tan bien como lo hacía antes. Como resultado, el cuerpo no puede producir suficientes proteínas o toxinas de filtro de la sangre como debería.
La cirrosis hepatica alcoholica está directamente relacionado con la ingesta de alcohol.
El Instituto Nacional sobre el Abuso de Alcohol y Alcoholismo define consumo excesivo de alcohol como beber cinco o más bebidas en un día en al menos cinco de los últimos 30 días.
¿Cuáles son las complicaciones?
La cirrosis hepatica alcoholica puede causar complicaciones graves. Esto se conoce como la cirrosis descompensada.
Los ejemplos de estas complicaciones incluyen:
- Ascitis, o una acumulación de líquido en el estómago
- Encefalopatía, o confusión mental
- Hemorragia interna, conocido como varices sangrantes
- Ictericia, lo que hace que la piel y los ojos tengan un tinte amarillo
Las personas con esta la forma más grave de la cirrosis a menudo requieren un trasplante de hígado para sobrevivir. De acuerdo con la Clínica de Cleveland, los pacientes con esta enfermedad descompensada que reciben un trasplante de hígado tienen una tasa de supervivencia a cinco años del 70 por ciento.
Su perspectiva dependerá de su estado general de salud y si ha desarrollado alguna complicación relacionada con la cirrosis. Esto es cierto incluso cuando una persona deja de beber.