La hidradenitis supurativa es una enfermedad crónica que se caracteriza por la aparición recurrente de nódulos, abscesos, fístulas o cicatrices en las áreas anatómicas donde existen glándulas sudoríparas apocrinas. Que es hidradenitis axilar, cuáles son las causas más comunes de esta patología.
La enfermedad es conocida con otros nombres como hidrosadenitis supurativa, enfermedad de Verneuil, apocrinitis o acné inversa.
Que es hidradenitis axilar: causas que la producen
La hidradenitis axilar causas es desconocida. El evento primario es el taponamiento de la piel en la salida del vello. Dentro de la piel, asociado al canal folicular están las glándulas sebáceas y las glándulas sudoríparas.
La oclusión del canal folicular condiciona una ruptura del mismo y la extrusión de sus contenidos, incluyendo las células de la piel, bacterias que viven asociadas al folículo, sebo, y los folículos pilosos en el tejido circundante, y aparece la respuesta inflamatoria característica de la hidradenitis supurativa.
Paralelamente a este acontecimiento, en los pacientes con hidradenitis supurativa, la respuesta inmunitaria que se produce en respuesta a la oclusión y ruptura folicular parece alterada, de manera que se produce una cascada de liberación de moléculas inadecuada, lo que conduce a una respuesta inflamatoria exagerada.
Los síntomas que presenta
Suele iniciarse con la formación de nódulos duros, dolorosos, en las axilas e ingle. Estas lesiones, se pueden resolver espontáneamente en el plazo de 7-10 días, sin dejar cicatriz. Estas lesiones son ampliamente conocidas como “golondrinos”.
En algunos pacientes, la inflamación de los nódulos progresa, y se forma un absceso, que es una lesión eritematosa, más dolorosa, y que puede drenar material purulento de forma espontánea o tras la manipulación.
Cuándo asistir al médico: tratamiento
Es adecuado acudir al médico si padece los síntomas descritos para establecer el diagnóstico adecuado.
Si el paciente experimenta brotes, se deberá efectuar un seguimiento acorde a la severidad, extensión y periodicidad de los mismos.
Siempre es recomendable consultar si aparece un nódulo, y es imprescindible si aparecen abscesos, ya que éstos pueden evolucionar a cicatrices o fístulas de difícil tratamiento.
El drenaje de los abscesos debe realizarse bajo supervisión médica que puede realizarse tanto en la consulta del médico de cabecera, en la consulta del dermatólogo o en el servicio de urgencias.