La osteoporosis es una enfermedad relacionada con los “achaques” de la vejez. Sin embargo, nuestro estilo de vida es una de las principales causas por las que se presenta esta enfermedad que debilita los huesos hasta volverlos quebradizos.
¡Tal como lo lees! Existen 4 hábitos «inofensivos» que dañan los huesos: ¿el dolor articular es señal de alerta?
Como sabrás, los huesos le dan soporte a nuestro cuerpo, permiten el movimiento y protegen a todos los órganos. Se trata de tejidos vivos que constantemente se renuevan para mantenerse saludables, es decir, se forma hueso nuevo (formación ósea) al mismo tiempo que se destruye el hueso envejecido mediante la reabsorción ósea.
El problema es que a partir de los 30 años nuestra masa ósea se pierde más rápido de lo que se crea, describen especialistas del instituto médico Mayo Clinic, por ello, la probabilidad de desarrollar osteoporosis dependerá de cuánta masa ósea obtuvimos durante la juventud.
Si nuestros hábitos no son los adecuados, los huesos se volverán más porosos, se adelgazan y se vuelven demasiado frágiles. De acuerdo con un artículo publicado por el NIH Osteoporosis and Related Bone Diseases National Resource Center, una caída, por más leve que sea, podría causarnos graves fracturas en el cuerpo, sobre todo en la cadera, la muñeca o columna vertebral.
La osteoporosis es una enfermedad “silenciosa” porque normalmente no presenta síntomas hasta que comienzas a romperte los huesos más rápido de lo que se generan los nuevos, causando dolor que muchas veces se confunde con molestia articular, pues el hueso colapsado podría pinzar los nervios de la zona.
Por otra parte, el dolor intenso en la espalda puede deberse a una fractura vertebral, a la pérdida de altura o malformaciones en la columna a causa de la osteoporosis, por ejemplo, si mantienes una postura encorvada.
¿Qué hábitos pueden dañar los huesos?
Existen algunos hábitos que pueden disminuir nuestra masa ósea hasta que se presenta un daño en los huesos, presta atención para que no te invadan los “achaques” y puedas mejorar tu calidad de vida.
1.Sedentarismo
El trabajo de oficina puede hacer que nos la pasemos sentadas la mayor parte del día, sin embargo, si no hacemos nada de ejercicio y llevamos una vida sedentaria, disminuimos la masa ósea, con ello se debilitan los huesos, pierden resistencia, agilidad y las articulaciones dejan de ser fuertes.
Los ejercicios que implican levantamiento de peso, así como los que promueven el equilibrio, ayudan a fortalecer nuestros huesos, una buena opción es salir a correr, saltar la cuerda o levantar pesas, pero con la supervisión de un profesional para evitar lesiones graves.
2.Hábitos alimenticios que dañan los huesos
El consumo de calcio es indispensable para mantener fortalecidos nuestros huesos, sin embargo, aunque lo encontramos en alimentos de manera natural en productos lácteos como la leche, el queso, yogur, verduras como la col, brócoli, frijoles de soya o incluso en cereales, también existen elementos que dificultan la absorción del calcio en los huesos.
- Sal: ya sabemos que el exceso de sal es poco saludable para la salud, pues podemos desarrollar problemas de hipertensión, pero eso no es todo, además nos descalcifica. ¡Tal como lo lees! Procura evitar los productos enlatados, los snacks salados, así como los alimentos con demasiados conservadores.
- Refresco: las bebidas de cola pueden contener grandes cantidades de ácido fosfórico, al consumirla con regularidad podemos reducir la absorción de calcio en nuestros huesos, sin esto comenzarán a debilitarse. Además, recuerda que los riñones también sufren con los refrescos.
3.Fumar debilita los huesos
El cigarro es altamente dañino para la salud, el problema es que las sustancias que contiene son tan adictivas que no es muy fácil de dejar este hábito, sin embargo, el tabaco debilita los huesos, de hecho , las mujeres que fuman tras la menopausia corren un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis, describe la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
4.No dormir lo suficiente
El insomnio es un mal hábito que nos debilita. Es necesario dormir bien para recuperar la energía, en el caso de los niños, es indispensable para su crecimiento. La falta de sueño puede dañar nuestros huesos al causar una disminución del mineral y la estructura de la masa ósea, cuando no descansamos adecuadamente nuestros huesos lo resienten, por ello, solemos despertar con “dolor de cuerpo”.
5.Usar tacones
Aunque no está relacionado con la osteoporosis, usar esos preciosos tacones la mayor parte del día puede afectar nuestra postura corporal, los huesos de los pies y el sistema muscular, a largo plazo, podríamos presentar problemas en articulaciones, músculos y huesos.
Si usamos tacones con una altura mayor a 5 centímetros, el hueso calcáneo se desplazará de su posición original, se aproximará a la altura de la articulación del tobillo afectando su funcionamiento, pero también sobrecargará las rodillas y caderas.